A pesar de que en países latinoamericanos como Chile, Brasil, Argentina y México ruedan tímidamente los autos eléctricos, Colombia estaba rezagada en la exploración de esta tecnología más limpia y amigable con el medio ambiente. Sin embargo, gracias a la voluntad de dos empresas energéticas del país y a la Renault, Colombia entra ahora en la era de los autos eléctricos, o por lo menos a la investigación de su viabilidad para comercializarlos, con la implementación de un plan piloto que pondrá a prueba dos modelos eléctricos producidos por la fabricante francesa: el Fluence ZE y la Kangoo ZE.
Las ciudades escogidas para poner a prueba los modelos eléctricos son Bogotá y Medellín, donde las empresas energéticas promotoras de este proyecto tienen sus sedes principales: Codensa SA en Bogotá, y EPM en Medellín. Ambas ciudades tienen una topografía ideal para poner a prueba el manejo del motor eléctrico. Bogotá, por ser una meseta bastante extensa con pocas pendientes, y Medellín por ser un valle donde abundan las lomas con lo que se requieren vehículos de mayor potencia.
Aunque para el periodo de prueba solo han llegado unos pocos autos a ambas ciudades, se espera que para el año próximo Renaulttraiga un lote de otros 250 automotores eléctricos que, igualmente, se distribuirán en esas dos capitales, según lo anunció a principios de este año el vicepresidente de Renault para la región América, Denis Barbier.
Los modelos que serán probados
El Fluence y el Kangoo eléctricos son dos autos muy diferentes tanto en su apariencia como en el uso que se les da. El Fluence ZE es un auto de 5 puertas de uso no comercial, mientras que el Kangoo se venderá como vehículo de trabajo, ya sea para el trasporte de carga o como taxi.
El Fluence tendrá las baterías detrás del asiento trasero, lo que reducirá un poco el espacio de la maleta. Su principal cualidad es lo silencioso al transitar, lo que lo convierte en un auto muy ecológico no solo por no utilizar fuentes de energía contaminante provenientes de los combustibles fósiles, sino porque disminuye al máximo la polución auditiva en las ciudades.
El motor eléctrico del Fluence tiene un una potencia de 70 kilómetros, lo que equivale aproximadamente a 95 caballos. Su autonomía, es decir el recorrido que podrá realizar con una recarga completa, será de cerca 170 kilómetros, dependiendo de la topografía donde se desempeñe. Si es en una zona con pendientes, se estima que la autonomía se puede reducir un 15%. Ya esto lo dirán las pruebas que se hagan en Medellín.
Por su parte, el Kangoo ZE es uno de los modelos eléctricos de Renault más populares. Son carros de trabajo que se desempeñan en áreas urbanas ideales para este tipo de motores por sus recorridos cortos, parando y arrancando constantemente, con lo cual se consume gran cantidad de gasolina. En este caso, el combustible podrá ser reemplazado por energía eléctrica, reduciendo notablemente los costos de rodamiento.
El motor del Kangoo eléctrico es de 44 kilovatios, que equivalen a unos 66 caballos de potencia. Como este automóvil debe tener un buen espacio de carga, o para los pasajeros en caso de utilizarse como taxi, las baterías se ubican debajo del piso. A diferencia delFluence, éste no es tan silencioso ya que se filtran con mayor facilidad algunos ruidos provenientes del contacto de las llantas con el asfalto y del aire, ya que este modelo no es el más aerodinámico. Sin embargo se dice que su conducción es ágil y divertida por la versatilidad y respuesta a la aceleración.
En defensa de los autos eléctricos
Quedamos muy a la expectativa de lo que pasará en estas pruebas piloto y de la respuesta del gobierno y las electrificadoras para crear una infraestructura que permita la masificación de los autos eléctricos en Colombia. Como lo ha venido reportando Vida Más Verde, esta tecnología avanza a pasos agigantados en ciudades de Europa y Norteamérica donde ya se comercializan modelos de famosas marcas como Nissan, Renault, Mitsubishi, Volvo, etc., y donde ya existe una red pública de estaciones recarga eléctrica.
Aunque los autos eléctricos tienen algunos críticos que alegan que su costo de producción es bastante alto, dejando atrás una extensa huella de carbono, creemos que esta es la mejor alternativa para reducir la polución en las ciudades, donde los autos alimentados por el petróleo y sus derivados son una de las principales fuentes de contaminación ambiental. No obstante, los buenos resultados solo se verán cuando los modelos eléctricos rueden masivamente.
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